Un virus escurridizo COVID-19.

El relato oficial de la aparición del virus se desmorona según pasa el tiempo.

Los tratamientos recomendados por la OMS fueron letales. Para averiguar qué pasaba tuvo que aparecer un grupo de médicos insumisos en Italia que afortunadamente se saltaron las sagradas normas y decidieron hacer autopsias. Así pudimos saber que los procedimientos de la OMS eran inadecuados. Como tantas veces en la historia, es la insumisión responsable y valiente la que saca las castañas del fuego a los comodones de salón. Enrique Costa Vercher es un médico español, insumiso y valiente, y Jesús García Blanca un investigador. 

Si sus afirmaciones fueran ciertas estarían poniendo en jaque la esencia del relato creado alrededor del Covid -19. En una larga entrevista en la televisión argentina TLV1dijeron cosas sorprendentes. 

Vayamos por partes.

Juan Manuel Soaje Pinto entrevista a los Dres. Enrique Costa Vercher y a Jesús García Blanca ambos españoles que tratan el tema Covid-19, Cuarentena, Barbijos, Vacunas y quienes están detrás de esta Pandemia.



Enrique Costa Vercher, médico de familia, licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Valencia (España) en 1979. Autor de varios libros: " Juicio a un virus inocente" en 1993, "Hijos de un dios terminal" en 2001 Mandala ediciones." Vacunas, una reflexión crítica" en 2014 ediciones "i", "Iatrogenia, la medicina de la bestia" editado por Amazon en 2019. Actualmente ejerzo de médico privado en Valencia. 

 Jesús García Blanca, escritor e investigador social. Colaborador desde hace diez años con diversas revistas de salud y educación. Actualmente escribe en Discovery DSalud (www.dsalud.com). Autor de libros en los que analiza críticamente temas de salud y medicina: -- El rapto de Higea. Mecanismos de poder en el terreno de la salud y la enfermedad (Editorial Virus, 2009) -- La Sanidad contra la Salud. Una mirada global para la autogestión (Ediciones i, 2015) -- Vacunas: una reflexión crítica desde la historia de la medicina y los descubrimientos de la biología, en coautoría con el Dr. Enric Costa (Ediciones i, 2015) -- Wilhelm Reich, inspirador de rebeldía (Cauac, 2019) Su primera afirmación fue que la mayoría de los médicos, de familia o especialistas, nunca habían visto un virus, salvo en fotos. 

Que deben remitirse a los trabajos de los biólogos moleculares quienes, a su vez, deben cumplir las normas homologadas internacionalmente para poder dar constancia de la existencia de un virus. “Por cierto, estas pruebas homologadas no se han presentado en este nuevo virus, Covid -19”

 De este virus no se ha presentado ninguna microfoto, ni fuera de la célula, es decir, aislado, ni dentro de la misma; ni se ha podido secuenciar la estructura bioquímica de nucleótidos, indispensable para poder dar fe de la existencia de cualquier virus. Biólogos moleculares de reconocido prestigio como Stefan Laika, Eleny Papadopulos o el Dr. Val Turner, así lo han denunciado.

 Por tanto, desde un punto de vista científico homologado, este virus no existirá hasta que los requisitos exigidos por la ciencia se cumplan. Este año no ha sucedido nada distinto respecto a otros anteriores. El número de muertos por el Covid -19 es parecido al de la gripe común de otras temporadas. Pero si este año alguien tratara de averiguar los fallecimientos por esta última causa, observará que la información ha desaparecido.

Todos se han imputado al Covid -19. A las autoridades les ha sido muy fácil encerrarnos en casa después del miedo inducido a la población. Cuando alguien diga que ha aparecido una vacuna, habrá quien salga corriendo para ponérsela y otros que no quieran. La cuestión es si se establecerá la obligatoriedad o no. La imposición, ignorando el consentimiento individual, sería una violación de nuestros derechos individuales, los que tenemos para decidir sobre nuestra vida.

 Las pruebas PCR no tienen validez. Toda prueba se fabrica a partir de los virus. Hay dos tipos de tests: los genéticos y los relacionados con las proteínas. Los primeros consisten en buscar fragmentos del genoma del virus –ADN o ARN- en una muestra obtenida de la persona. Los segundos se basan en la reacción del sistema inmunitario a elementos extraños en el cuerpo del paciente. Esta reacción se llama de antígeno-anticuerpo; el test tratará de detectar los antígenos o los anticuerpos. Para la fiabilidad de cualquiera de estas pruebas es necesario haber aislado al virus objeto de la misma.

Sin este requisito no podemos conocer sus componentes y, por tanto, imposible fabricar un test fiable. Al no haberse aislado al virus, lo que detectará el test podrá ser cualquier cosa, menos algo relacionado con la existencia del virus específico, y estará dando resultados no fiables tanto cuando sean positivos como negativos. La medicina moderna se ha convertido es una especie de pseudorreligión donde los médicos actúan de sacerdotes.

Lo que hoy se aprende en la universidad son los llamados protocolos; son como las normas del catecismo y, como buena pseudorreligión, no se discuten, se acatan. A los profesionales de la salud se les dice: si esta prueba da positivo es porque el paciente tiene coronavirus, pero no saben nada acerca de la prueba ni si el virus ha sido aislado o no. Se limitan a observar el resultado del test y poner en práctica el siguiente punto del protocolo. 

 La OMS estableció que cualquier muerte sin una causa absolutamente clara podría ser adjudicada al Covid -19. El Dr. Costa, antes de finalizar, hace una reflexión llena de incorrección políticosanitaria: En los últimos 80 años, la vacunación contra un sinnúmero de patologías se ha convertido en un factor de la cultura moderna. En los últimos 50 años, han aparecido gran cantidad de enfermedades del sistema inmunitario; hablamos de las alergias. Es decir. Nunca antes en la historia el sistema inmunitario había sido tan manipulado; y nunca antes en la historia habían aparecido tantas enfermedades debido a una falla de este mismo sistema.

 ¿No tendrá nada que ver una cosa con la otra?

 Recordémoslo por si llegara el caso en que fuera necesario, ya que los medios de masas están y estarán muy ocupados en la fabricación del relato oficial: Desde un punto de vista científico homologado, este virus no existirá hasta que los requisitos exigidos por la ciencia se cumplan. Según el Dr. Enrique Costa y Jesús García, hoy por hoy, no se han cumplido. La consecuencia de esto sería –según las mismas personas- que las pruebas diagnósticas –PCRs u otras-, así como cualquier vacuna, carecerían en este momento de fiabilidad.

Sin tapujos Marcelino Lastra Muñiz FUENTE: https://www.miciudadreal.es/